lunes, 26 de noviembre de 2012

ENTREVISTA A H.I.J.O.S: “NO ALCANZA CON QUE VAYAN PRESOS LOS MILICOS, QUEREMOS UN MUNDO MEJOR”. Abril 2006


Durante la semana de la conmemoración de los 30 años del Golpe Militar  y en el marco de las actividades organizadas, estuvieron presentes en nuestra Comarca dos representantes de la organización H.I.J.O.S de la regional de Capital Federal.

AL SUR del VIENTO tuvo la posibilidad de compartir charlas informales a parte de una extensa entrevista con los dos chicos: Ana Del Valle y Santiago Del Valle.

En la entrevista recorremos varios temas. Como surgen las primeras incógnitas acerca de sus identidades, la llegada a H.I.J.O.S, la militancia de sus viejos, la política de Derechos Humanos de K, la división de H.I.J.O.S y el avance en la lucha de los derechos Humanos.

Ahora la entrevista…

-¿Cómo surge el interrogante acerca de sus identidades, acerca de si podían ser hijos de desaparecidos?

-Ana (A): bueno nosotros siempre supimos la verdad. Tuvimos la suerte de criarnos en una familia en la que nunca se nos ocultó la verdad, estuvimos presentes en el momento del secuestro, no nos acordamos porque éramos bebes, pero igualmente siempre lo supimos. Además teníamos a nuestro tío materno preso político y nuestro tío paterno exiliado, siempre supimos lo que estaba pasando. Pero era difícil porque no se podía hablar mucho sobre del tema.

-Santiago (S): nuestra abuela nos decía que hubo una guerra y que los militares malos mataron a nuestros padres, era esa la expresión y después empezamos a entender de chicos lo que nos había pasado.

-Por ahí al ir creciendo se iban dando cuenta de la verdad…

-A: claro, porque no era una mala intención.

-S: era una explicación de porque los habían matado, era una guerra y la expresión de nuestra abuela era que nuestros papás luchaban por un país mejor. No había más profundidad que eso.

-¿Y la entrada a H.I.J.O.S fue natural?

-S: yo me entero de H.I.J.O.S porque yo estaba en un taller grupal de terapia de adolescentes que se llamaba el “movimiento”.

A: eran hijos de desaparecidos con un grupo de psicólogos que se había armado para atender a hijos de desaparecidos pero con juegos, no era la terapia clásica.

S: me acuerdo cuando fue la elección presidencial el 14 de mayo de 1995, con la reelección de Menem, que fue la primera vez que iba a votar y encuentro a mi viejo en el padrón y me agarró una crisis nerviosa y lo entre a putear al pendejo que estaba en la mesa. Yo quería que lo tacharan, que lo sacaran. Y lo sacaron.

Después llegó a mi casa y llamó a un canal de televisión comunitario que se llamaba Utopía para contar esto que me había pasado y justo había pibes de H.I.J.O.S que recién empezaba, esto fue en mayo del 95 e H.I.J.O.S empezó en Semana Santa de ese año.

Luego nos enteramos de que esto de que los desaparecidos estén en el padrón había sido una lucha de las Madres.

Cuando fui a votar devuelta trate de hacerme de nuevo el desesperado y no me salió tan bien…

-¿Los viejos de ustedes eran militantes del Ejército Revolucionario del Pueblo –ERP-?

-S: ellos se conocen militando en el ERP. Mamá estudiaba sociología y papá era maestro y estudiaba arquitectura. También papá tuvo militancia gremial.

-A: después estuvieron en lo que se llamó el ERP 22 de agosto, que era una fracción que se divide del ERP y ellos apoyaban la candidatura de Cámpora.

-Porque un sector del ERP acepta la tregua y otro no…

-S: el sector grande que respondía a Robi Santucho no acepta la tregua, igual en las fracciones había diferencias, pero lo de Cámpora fue el detonante de la fractura.

Cuando cae el “gallego” Fernández Palmeiro, que era el cabecilla del ERP 22 de agosto, se fractura el ERP 22 de agosto. Uno se va para Montoneros y otro que se vuelve al ERP. Eran tres grupos y encima eran chicos. Nuestro viejo queda en lo que fue el ERP 22 de agosto y mamá y nuestro tío exiliado se pasan a Montoneros.

-¿Como ven la cuestión generacional? ¿Las diferencias en las luchas que daban la generación de sus viejos y las que da nuestra generación? Porque sus viejos vivieron en una etapa en donde la revolución estaba ahí nomás, había que hacerla nomás. Hoy no pasa eso y se descalifica mucho a nuestra generación porque “no se la juega”.

-A: y eso es parte del mismo plan sistemático. Para poder implantar esto fue necesario el terror desde el estado, hacer desaparecer a la gente y el tema del disciplinamiento de la clase trabajadora. Para poder imponer este modelo hay que disciplinar todo, matar y hacer desaparecer. O sea decir “vos no tenés posibilidades de cambiar nada”. Y hoy por hoy la desmovilización tiene que ver con eso, no quedó ningún valor.

-S: y aparte la cuestión generacional es distinta. Es otra la realidad y tiene que ver con eso. Mi viejo tenía 27 años cuando lo llevaron y era un hombre, padre de dos hijos, y yo a veces me siento un pajerto a los 30.  Pero a mi me gusta igual mi generación, yo la valoro, por más que este mucho en la boludez. Valoro mucho la de mi viejo y la disciplina que tenía, pero hoy no me la puedo imaginar.

-Quizás porque el contexto era diferente, por ahí si nuestra generación estaría ubicada en un transe histórico como la de los 70 sería otra la historia…

-S: más vale, que no te quepa la menor duda. Pero digo, si queremos trasladar esas experiencias –sacando lo que es la lucha armada- disciplinaria, de estructura y de vanguardia estamos todos locos. Porque hoy hay partidos de izquierda que se siguen planteando eso, esa cosa de vanguardia, de iluminados y de que la gente es toda pelotuda y nosotros estamos al frente. Yo veo que no llegas a la gente. Desde el vamos no te ves igual al otro y te crees que estas por encima.

-Es tremendo ver como hay cierta militancia que sigue reproduciendo todo eso…

-S: si es re loco.

-A: y están totalmente alejados de la realidad.

-Y a los 30 años no militan más…

-S: son una máquina de limar pendejos y eso es lo más triste. Sobre todo en la Facultad. Porque los tienen tres años quemándoles el coco con no se que cosa y esa gente después larga la militancia. No sirve para nada.

Yo tenía hace algunos años una idea muy cuadrada, y me di cuenta que no llegas a nada ni a nadie. Además te manejas en un microclima de compañeros en donde todo puede ser. Hoy me convenzo que es entre todos o no es. Y capaz que sale cualquier cosa. Pero es genuino que lo hagamos entre todos y no el manual.

-A: pero que quede en claro que no estamos de acuerdo con el gobierno que habla de la “izquierda siniestra”. Lo siniestro no es ser de izquierda, todo lo contrario. El tema es que esos grupos están descolgados completamente.

-S: de lo que me convencí es que no alcanza con el Juicio y Castigo. Las reivindicaciones de mi viejo no serían Juicio y Castigo. Eso decanta solo. La reivindicación es por otro mundo. No alcanza con que vayan presos los milicos.

-Vemos que con H.I.J.O.S nace una liturgia nueva. Había una visión muy derrotista en la lucha de los Derechos Humanos. Con H.I.J.O.S ingresa la alegría, la creatividad y especialmente el Escrache. ¿Cómo nace el Escrache?

-S: yo empecé en la Comisión de Escrache y éramos muy pocos. Cuando empezamos éramos 50 pibes. No es como hoy que hay una Mesa de Escrache que entran otras organizaciones. Al principio la Comisión de Escrache era solo de HIJOS. Nosotros íbamos al Centro de Estudios Legales –CELS- que tiene un archivo tremendo de las caras no conocidas de los “grupos de tareas”,  Rolón, Pernía, el “turco” Julián, que no son los Comandantes.

Y a esas fotos las sacó un tipo que era fotógrafo que no se que trabajo le tuvo que hacer a los milicos dentro de la ESMA y le sacó fotos y se las encanutó, una copia de cada foto y ese es uno de los archivos más importantes que hay. También había testimonios, estaban los prontuarios de los tipos.

Había que rastrear donde vivían, donde laburaban, muchos laburaban en las Empresas de Seguridad, en el grupo Yabrán. Era un trabajo de investigación y seguimiento. Me acuerdo que el primer escrache fue a un médico, Maniáco se llamaba, que era tipo que atendía partos en la ESMA.

-A: ese seguía trabajando en el Sanatorio Mitre en Once y trabaja con la mayoría de las Obras Sociales o sea que a cualquier persona le puede tocar el tipo. Es más, yo en mi Obra Social lo tenía como posibilidad. Ni en pedo lo elijo.

-S: pero pasaba que en los primeros escraches nos daba miedo. Estábamos re-paranoicos.

-A: estábamos paranoicos por la impunidad que reinaba en la sociedad y estábamos en pleno menemismo, donde hubo represión a movilizaciones por los Derechos Humanos, incluso en una del 24 de marzo. Reinaba la impunidad, estaban los asesinos libres y eso te daba miedo.

-S: en los primeros Escraches no convocábamos como ahora. Llamábamos por teléfono a los organismos de Derechos Humanos, a los partidos, pero no era que salíamos a pegar afiches de que tal día íbamos a hacer un Escrache. Porque teníamos cagazo. Era ese día en tal lugar. Entonces se juntaban unas 50 personas, 200 canas, pintábamos con aerosol y ahí manchábamos a la plaza. 

Después se empezaron a hacer más masivos, hubo represión en algunos Escraches. Y después nos metimos con los más conocidos. Me acuerdo cuando fuimos a Escobar a Escrachar a Patti y el clima era asperísimo porque la propia gente  lo había votado como intendente.

Igual hoy hay más información, se trabaja de otra manera. La Comisión de Escrache organiza el Escrache como dos meses antes, la Mesa de Escrache se traslada a hacer las reuniones al barrio donde vive el milico, en alguna organización del barrio y se invita a todos a participar. Con mucho tiempo se empieza a volantear, a pegatinar. Hace algunos años que no se reprime más. Obviamente ese día nunca lo encontrás al tipo ahí, pero el hecho está.

-A: también depende de los barrios, por ejemplo en los barrios más chetos de la Capital, Barrio Norte o Belgrano,  no hay mucha participación de los vecinos, pero en los otros barrios es increíble, porque la gente se entera en ese momento y se los condena socialmente. Y la mayoría de los milicos se tienen que mudar, se tienen que ir porque no pueden estar. Porque lo máximo que sabrían los vecinos es que era milico pero no que había participado en la dictadura.

 -¿Como ven la política de Derechos Humanos del Gobierno de Kirchner?

-A: eso lo vamos a responder individualmente. No como H.I.J.O.S o como organización. Yo creo que la política del gobierno era necesaria. No le pongo la victoria al gobierno,  me parece que tuvo que ver con un momento social que se logró gracias al laburo de todos los organismos de generar un consenso social de repudio al accionar de las Fuerzas Armadas. Me parece que no se está diciendo nada con los cómplices civiles, con los medios de comunicación. Lo que puedo decir es que la política de Derechos Humanos de la década del 70 esta dentro de las expectativas que podemos tener, salvo que los milicos estén en cárceles de privilegio, por ahí en eso tiene que ver el poder judicial y no el ejecutivo. Pero por los Derechos Humanos de hoy en día no se hace demasiado desde el estado. No hay una política de defensa de los Derechos Humanos actuales, hay mucha gente que se muere de hambre, hay represión en las comisarías.

-S: yo lo veo con mejores ojos. Lo que si le creo a Kirchner, le creo que los odia a los milicos, los odia hasta por demás. Fue de esa generación y debe tener gente conocida que fue desaparecida y lo ha comentado. Y hasta a veces me parece que les moja la oreja. Que se yo, nombrarle a la Garre de Ministra de Defensa, a los milicos ponerles una mina y encima esposa de Abal Medina.

 -Y otra visión posible sería que es muy demagógica esa política. ¿No será también que el sistema está dispuesto –por la presión que hay- ha dar ciertas concesiones en el tema de Derechos Humanos y no por ejemplo en la ruptura del modelo económico?

-S: si entendiendo lo que dicen, pero igual con respecto a los Derechos Humanos de hoy, que no están resueltos, creo que hay políticas en ese sentido. Capaz que yo las quiero ver con mejores ojos y no es tan real. Pero por ejemplo manda a los milicos a las marchas sin fierro, con lo que significa para los milicos ir sin fierros, para un cana no es una boludez que te manden al frente sin fierros cuando vos odias a la gente y la gente te odia.

Pero para mi el cuestionamiento del Golpe no era un reclamo generalizado, era el reclamo de los organismos de Derechos Humanos, no era que la sociedad reclamaba.

Te digo que en un momento se planteo llamar a un Plebiscito, a una Consulta Popular, para que la gente vote si se anulan o no las “Leyes del Perdón” y dijimos NO, por miedo.

-A: ese momento era un momento particular, HIJOS recién empezaba y había toda una impunidad.

 -¿Porque se da la división de HIJOS en dos sectores?

-S: fueron cuestiones políticas. Ya antes de eso H.I.J.O.S había abierto su población, porque en sus orígenes H.I.J.O.S era hijos de desaparecidos, exiliados, asesinados y presos. Después empezó a haber un frente de apoyo y se abre a la población. Igual antes que se abra a la población se divide H.I.J.O.S. De hecho H.I.J.O.S original, con puntitos –Hijos por la Justicia contra el Olvido y el Silencio- se abrió a la sociedad y hay muchos hijos de desaparecidos. En el otro no veo casi hijos de desaparecidos, igual no lo veo mal, pero es solo un sello.

-A: pero el otro sector casi que no existe más.

-Bueno para terminar chicos, ¿Cómo vivieron estos 30 años? Se ha avanzado muchísimo en la lucha.

-S: si totalmente. Pero para mi en lo que más se ha avanzado es en el tema de reivindicar esa generación, ya la "teoría de los demonios" no existe más. No hay más cabida. Y la generación de mis viejos tiene el lugar que se merece y que se ganaron con la lucha.

 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ana y Santiago, me gustaría volverlos a ver. Soy Elisa, vivía en el mismo edificio que su abuela Luisa y todos los fines de semana jugabamos los cuatro con mi hermano Gabriel. Mi mail es arte.sana@yahoo.it